Disputó su último encuentro en el Inter de Miami equipo de la Major League Soccer de Estados Unidos el ex delantero de la selección argentina. El partido fue en la primera ronda de Playoffs y su equipo quedó eliminado por 3 a 0 ante New York FC. Al finalizar, se vio al Pipita muy emocionado.
La última función del goleador Gonzalo Higuaín como futbolista profesional. Era uno de los referentes del equipo que tiene como presidente a David Beckham. El partido correspondía a los cuartos de final de Conferencia de la Major League Soccer (MLS) y cargado de emociones, rompió en llanto en medio del campo de juego. En ese momento fue Maximilano Moralez, el exjugador de Racing y Vélez que hoy juega en el New York FC, quien se acercó a consolarlo.
Pipita cerró una carrera brillante, llena de títulos y una gran cantidad de goles repartidos en River, Real Madrid, Napoli, Juventus, Milán, Chelsea, Inter y la Selección argentina.
¿Su futuro será ligado al fútbol?
Pipita contó en una entrevista que le brindó a Univisión que su futuro será lejos del fútbol. “Muy lejos. Lo voy a disfrutar hasta que deje de jugarlo, pero después no lo quiero ni de cerca. Es un mundo muy contaminado. No siento dolor, pero sé que es un mundo en el que no quiero estar”, cerró.
El repaso de la carrera de Gonzalo Higuaín
El Pipita tuvo una carrera de 17 años y medio en donde estuvo en varios clubes reconocidos del mundo, en las primeras divisiones de Italia, España e Inglaterra, al igual que con la Selección argentina, con un récord de más de 300 goles y 100 asistencias en más de 700 apariciones.
Higuaín fue reconocido por colegas y el mundo del fútbol como uno de los grandes goleadores de los últimos tiempos. Entre sus logros, tiene la estadística de ser el máximo goleador extranjero en la Seria A cuando en una temporada fantástica marcó 36 goles. Sus actuaciones hicieron que la Juventus posará sus ojos en él y pagó cerca de 100 millones de dólares por su pase.
El Pipa pudo haber jugado para la selección de Francia, pero eligió a su Argentina
Su padre, Jorge Higuaín fue futbolista y se encontraba jugando en la ciudad de Brest, Francia, lugar de nacimiento de Gonzalo. Cuando el Pipita jugaba en River Plate, ya había decidio jugar para la Argentina, siendo que fue tentado para ponerse la camiseta de ‘Les Bleus’. Debutó bajo el mando de Diego Maradona en 2009 y anotó un total de 32 goles en diez años con la Albiceleste. Es el quinto máximo artillero en la historia del seleccionado.
Pasó del Napoli a la Juventus, el pase más alto en la historia de un argentino
La vida del futbolista pasa por transferencias de contratos y la carrera del “Pipita” tuvo grandes traspasos de clubes. En primer lugar, hay que mencionar su pase de River directamente al Real Madrid por una suma de 12 millones de dólares en el 2006. Después de varios años en la “Casa Blanca”, fue transferido al Napoli, viejo equipo de Diego Maradona, por 39 millones. Vino el pase que hasta el momento es el más caro de un futbolista argentino en el mercado, el cual la Juventus de Italia adquirió sus servicio por 90 millones con el objetivo de conquistar la Champions League. Los últimos pases fueron hacía otro grande de la Serie A, el Milán por 55 millones y su paso por el Chelsea de la Liga Inglesa por 50 millones de dólares. Finalmente, cerró su última transferencia al Inter de Miami por 15 millones con el objetivo de jugar en la misma liga que su hermano, Federico Higuaín.
Los compañeros del Pipita
El ex delantero argentino tuvo una carrera de 17 años y compartió cancha con grandes estrellas del fútbol como: Leo Messi, Dí María, Cristiano Ronaldo, Carlos Tévez, Eden Hazard, Sergio Ramos, Paulo Dybala, Sergio Agüero, Javier Mascherano, Paul Pogba, Iker Casillas, Karin Benzema y Raúl González.
En su etapa en River Plate con un paso muy breve, ya que fue cedido al Real Madrid, jugó con Marcelo Gallardo, Ariel “Burrito” Ortega y el colombiano, Radamel Falcao García. Además, su hermano Federico y su padre, Jorge, también vistieron la banda roja del Millonario, un legado familiar.
Gonzalo siempre mostró el afecto y el deseo de su madre, el cual era volver a ver a sus hijos jugar juntos y lo lograron en el Inter de Miami de Estados Unidos.