Un presunto ajuste de cuentas deja un muerto y un fugitivo. Tras varios días luchando por su vida, falleció un hombre que había sido apuñalado 14 veces en su casa en Villa Diamante, Lanús. El agresor, que ya ha sido identificado por las autoridades, sigue prófugo de la Justicia.
El hecho ocurrió el pasado 28 de junio, cuando la víctima fue interceptada por un hombre desconocido que había irrumpido en su vivienda. De acuerdo al relato que aportó el hombre, el ladrón le robó dinero y ropa antes de atacarlo en repetidas ocasiones con un arma blanca.
A raíz de un llamado realizado a la línea de emergencia 911, los agentes del Comando de Patrullas de Lanús acudieron a la dirección indicada y asistieron al hombre que se encontraba con el torso desnudo y bañado en sangre. De esta manera, los oficiales lo trasladaron de urgencia hacia el Hospital Evita.
Según la información obtenida, al ser ingresado en el nosocomio, los médicos confirmaron que este contaba con 14 heridas de arma blanca. Asimismo, remarcaron que la mayoría de las lesiones provocaron daños graves en el hígado, las cuales desencadenaron en su posterior muerte.
La investigación del caso recayó en la jurisdicción de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) N° 5 del Departamento Judicial de Avellaneda-Lanús, quien ordenó una serie de medidas para esclarecer la trama que podría estar vinculada a un supuesto ajuste de cuentas. Hasta el momento, los investigadores sospechan que la víctima podría haber estado vinculada a la venta de sustancias prohibidas.
Sin embargo, la versión que apuntaría a que el hombre sería un “dealer” de drogas no fue confirmada de manera oficial, pese a que la información fue proveída por varias personas que fueron entrevistadas. Incluso, señalaron que la víctima era un “vecino nuevo” en la zona, ya que había alquilado la vivienda hacía un mes y medio.
De la misma manera, el fiscal a cargo del caso ordenó que se realizara un análisis en la escena del ataque mientras el hombre se encontraba hospitalizado. Fue así como los agentes secuestraron el DNI de un hombre, que se presupone que se trataría del agresor, retazos de nylon y una balanza que se encontraba en la cocina.