La esperanza se extinguió para el Millonario, que no logró concretar una remontada épica en su enfrentamiento decisivo. Con un empate sin goles en el Estadio Más Monumental, el equipo argentino se despide de la Copa Libertadores en las semifinales, dejando a Mineiro como finalista del prestigioso torneo internacional.
El partido estuvo cargado de emociones e intensiones de lograr revertir el marcador adverso que Atletico Mineiro le propinó a River con un 3 a 0 contundente. Sin embargo, al pasar los minutos el local no encontraba ese gol que le sirviera de apoyo emocional para ir en busca de la gloria total.
Con un marco excepcional y un recibimiento histórico para tratar de amedrentar al rival de turno, el hincha de River merece una “mención especial” dijo Marcelo Gallardo. El empuje se sostuvo durante todo el partido a pesar del marcador encontra.
La necesidad en la vuelta siempre estuvo del lado de River, el equipo que dirige Gabriel Milito apostó a aguantar los primeros minutos y apenas lanzar en largo para la dupla Deyverson y Hulk.
El Millonario buscó con muchos centros al área chica y poco juego asociado en la mitad de la cancha. Las bandas fue el fuerte de River, pero a la vez, era un juego previsible que Alonso y Bataglia rechazaban todo lo que pasaba por allí.
Una vez más, el equipo argentino falló en el arco rival y la falta de gol de los delanteros y el mediocampo. Un síntoma desde la vuelta de Marcelo Gallardo fue la falta de gol y el bajo nivel de los delanteros.
Finalmente, entraron a la cancha los juveniles de River, Mastantuono y Echeverri al ritmo de los aplausos para alentar a las promesas del equipo. Si bien levantaron el nivel de juego, nunca se pudo romper el cero y el partido terminó en empate y en victoria global para los brasileños.