River Plate recibió un duro golpe en la Copa Libertadores: ayer fue arrollado por Atlético Mineiro, que se impuso 3 por 0 en Belo Horizonte (4-0 en el global). Matías Zaracho (en dos oportunidades) y Hulk convirtieron para el Galo, que aprovechó el desequilibrio mostrado por la Banda en su afán por revertir el 0-1 del encuentro de ida. Así, las semifinales del máximo certamen continental se quedó sin representantes argentinos. River padeció la ausencia de Enzo Pérez (suspendido), pero al local le faltó Nacho Fernández. En el roce de las alternativas, una vez más, se advirtió la distancia entre uno y otro.
Pero la llave dejó en claro que el Millonario sufrió la sangría de figuras en los últimos años, con Gonzalo Montiel como último exponente. La última camada de compras (Vigo, Paradela, Palavecino, Romero, Fontana, Enzo Fernández, entre otros) todavía no atravesaron la etapa de adaptación ni le ofreció el salto de calidad que una instancia tan avanzada de Copa demanda. A diferencia de lo sucedido en la edición pasada, en la que puso de rodillas al Palmeiras, esta vez no alcanzó y perdió sin contemplaciones.
Atlético Mineiro se medirá en semifinales justamente ante Palmeiras (vigente campeón de la competencia), elenco que viene de golear por 3- 0 al San Pablo de Hernán Crespo en el partido de vuelta. Y River deberá continuar con su reconstrucción, pensando en la Liga Profesional, a la espera de lo que ocurrirá con Gallardo a fin de año, cuando se le termina el contrato.