La Conferencia Episcopal Argentina (CEA) confirmó que finalizó el proceso de renuncia de los arzobispos, obispos diocesanos y obispos auxiliares, de los fondos que cubría la ley 21.950 que permitía el percibimiento de aportes estatales.
Cuando se confirmó la medida:
La anterior legislación empezó a regir en el país el 1° de enero de 1979, cuya iniciativa fue creada y firmada por el gobierno de facto de Jorge Rafael Videla, Jose Martínez de Hoz y Carlos Pastor. La ley, otorgaba a los arzobispos y obispos una asignación mensual mientras estaban en funciones del 80% de la remuneración de los jueces nacionales de Primera instancia.
Si bien, la medida se confirmó este martes, las renuncias se empezaron a tomar a partir del 26 de abril de 2023. “El Ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto en uso de sus facultades, dio lugar a que los arzobispos y obispos que hayan cesado en sus cargos por razones de edad o de invalidez puedan solicitar de manera particular, con una serie de requisitos, recibir el beneficio de la asignación prevista en la ley“, informó la CEA en un comunicado de prensa.
Iglesia y estado asuntos separados:
Por otra parte, debido al movimiento “Iglesia y estado, asuntos separados”, desde el 2018 la Institución histórica decidió renunciar de manera progresiva a los fondos estatales” y por esta razón que en julio de 2020 “los obispos avanzaron en su idea de generar nuevos mecanismos para financiarse y presentaron el Programa de Financiamiento Eclesial (FE).
Hay que destacar que este aporte estatal cubría solamente el 10% del presupuesto total de la Iglesia, era de gran ayuda para las diócesis más pobres, pero en el resultado general, no causaba gran diferencia.