El presidente de Brasil, Lula Da Silva, se sometió a su segunda intervención quirúrgica, tras haber sido operado de urgencia el martes pasado debido a una hemorragia intracraneal.
El objetivo de la intervención, la cual era de bajo riesgo, fue minimizar el riesgo de sangramientos futuros . Uno de los médicos de Lula, Roberto Kalil, afirmó que ”la intervención fue con éxito” y “el presidente está despierto y conversando”. Esta se decidió este miércoles, aunque ya estaba previsto como posibilidad desde que terminó la cirugía del martes.
La intervención se realizó a las 7:25 a.m, duró, aproximadamente, una hora y se realizó en la sala de cateterismo en el Hospital Sirio-Libanés de São Paulo. Aunque la cirugía termino, Lula se mantiene internado como “parte del programa terapéutico, un complemento de cirugía con procedimiento endovascular”.
Kalil agregó que “No hay ningún cambio en el estado de salud del presidente. La evolución es muy buena”. Por otro lado, el hospital afirmó, a través de un comunicado, que Lula “está lúcido, orientado y conversando” pero “permanece con drenaje mientras aguarda nuevos exámenes de rutina”.
Estos procedimientos se dan en consecuencia a la caída que sufrió Lula el 19 de octubre en el baño de la residencia oficial. En el momento, recibió puntos de sutura y se mantuvo en observación por si surgían complicaciones.
Por el momento, las actividades oficiales de Lula se mantendrán suspendidas, priorizando la recuperación del jefe de Estado. La estimación es que el presidente permanezca hospitalizado hasta la semana próxima.