El Gobierno de la Ciudad, en puja permanente con el Programa integra a 2000 chicos y chicas en 16 orquestas. Y ahora prepara una serie de conciertos para celebrar sus 25 años.
“El objetivo principal es restablecer un derecho que tienen los pibes y pibas a educarse y aprender un instrumento”, resalta el músico Oscar Albrieu Roca, coordinador general del Programa de Orquestas Infantiles y Juveniles de la Ciudad de Buenos Aires, que en octubre cumplirá 25 años trabajando en barrios populares con el fin de favorecer la inclusión y la integración social. “Nosotros trabajamos mucho en paralelo con lo que se hace en la escuela porque nos parece importante que a través de la música desarrollen hábitos que son valiosos en lo musical pero también en la vida”, explica. “Para poder afinar una nota en un violín, por ejemplo, necesitás mucho tiempo de trabajo en tu casa. Y eso vemos que se traduce en un mejoramiento en el rendimiento escolar, porque aprenden ciertas rutinas de estudio”.
En el marco del 25 aniversario del Programa, a mediados de mayo se realizó un acto en la Legislatura Porteña con un concierto en el que tocaron dos orquestas de Balvanera y se entregó una placa a los responsables del proyecto. Fue también el inicio de un ciclo de conciertos que tiene como fin conmemorar los 25 años. El próximo será el viernes 16 de junio a las 19, también en la Legislatura, y habrá seis conciertos más hasta fin de año. “La sala estaba llena de familias, amigos y ex profesores”, celebra Albrieu Roca. “El festejo grande lo vamos a hacer el 28 de octubre en el Parque Roca donde tocarán los 2000 chicos que integran el Programa. En la semana previa, en la Facultad de Derecho, haremos otro concierto importante. Y el 16 y 17 de diciembre habrá conciertos en el Teatro Colón”, adelanta el coordinador general.
“Nos parece muy importante en la formación de las personas tener una educación colectiva”, resalta. “Y la orquesta es un lugar colectivo por excelencia. O sea, si uno no cumple bien el rol respetando al de al lado la orquesta no suena. Si vos tocás cuando no tenés que hacerlo o no hacés silencio cuando el compañero tiene que tocar la orquesta no funciona. Y a su vez si no decís lo que tenés que decir con el instrumento cuando te toca la orquesta tampoco suena. Entonces todo ese ejercicio tiene que ver con armar una buena ciudadanía. Esto no lo hacemos explícito a los chicos, es un ejercicio que se va dando y ellos lo incorporan”, dice. “Además, en toda la etapa inicial e intermedia las clases son colectivas, inclusive con chicos de distintas edades y niveles. Quizás para los profes es más trabajo porque requiere una preparación distinta, pero para los chicos es muy rico poder aprender de un par o de un alumno un poco más grande”.
Las orquestas se crearon en 1998 de la mano de Claudio Espector y Beatriz Fuchs en Villa Lugano. Actualmente hay 16 orquestas en Retiro, Bajo Flores, Balvanera, Constitución, Floresta, La Boca, Barracas, Lugano, Mataderos y Parque Avellaneda. “Las últimas dos orquestas se abrieron en 2019. Insistimos mucho para crear una orquesta para los pibes que se quieren dedicar más seriamente a la música. Por eso, una de las orquestas que abrimos se llama TAM, que significa Trayecto Académico Musical”, precisa Albrieu Roca. “Tiene otro nivel de exigencia, convenios con los conservatorios y un perfil distinto a las orquestas iniciales. Y la verdad es que está funcionando muy bien. También armamos proyectos interdisciplinarios: trabajamos con el Taller de Danza Contemporánea del Teatro San Martín e hicimos un ciclo de conciertos con eso”.