Luego de que la candidata a vicepresidenta, Victoria Villaruel realizó un acto negacionista de homenaje a las víctimas de Montoneros y ERP de los crímenes de la última dictadura militar, se generó una movilización en la que participaron organizaciones de derechos humanos y distintos partidos políticos.
“El negacionismo es fascismo” y “Fue genocidio, no guerra” expresaron los manifestantes fuera del edificio, en un clima de tensión en el que intentaron derribar las vallas dispuestas por la Policía de la Ciudad, ya que el acto de Villaruel evidentemente es un acto de provocación.
Pero el principal organizador de este “homenaje”, fue el Centro de Estudios Legales sobre el Terrorismo y sus Victimas (Celtyv) del que no sorprendentemente, Villarruel es presidenta honararia. “Aquí vivimos en un relato eterno, sin embargo, en la década de los 70 organizaciones armadas causaron miles de víctimas. Durante años, las víctimas del terrorismo fueron desaparecidas de la memoria, se las negó”, expresó la Diputada.
De igual forma, añadió que los que no permitieron que el acto se realice son cómplices de los que asesinaban y derramaban la sangre de inocentes y sólo quieren la democracia para ellos y los derechos humanos con exclusividad.
Si bien el repudio partió desde el principio con una movilización en la que estuvieron presente el Partido Obrero, HIJOS, MST, Frente de Izquierda, Libres del Sur, Partido Comunista, Frente Popular Darío Santillán y del Centro de Estudiantes de la Universidad de las Madres de Plaza de Mayo, de igual forma, el bloque de Unión por la Patria, emitió un comunicado en el cual sus integrantes repudiaron cualquier expresión de negacionismo.
“Resulta inaceptable que una institución fundamental del sistema democrático como la Legislatura porteña sea un espacio donde se reivindique a la dictadura y se llevan adelante acciones que buscan instalar nuevamente la teoría de los dos demonios”, estableció el documento criticando el hecho de que la Legilastura Porteña sea sede de este tipo de acto.
Hay que tener en cuenta que el vicepresidente de la Legislatura y diputado de Juntos por el Cambio, Emmanuel Ferrario, se retiró del edificio dos horas antes de la conferencia y asimismo se les prohibió a la prensa cubrir el evento.