Tulum atrae a miles de argentinos que buscan un turismo más natural y sostenible en la Riviera Maya. Con su nuevo aeropuerto internacional y vuelos directos desde Buenos Aires, se ha vuelto un destino accesible para quienes desean una experiencia más tranquila y cercana a la naturaleza.
“Las cosas no son como eran antes, y eso no es necesariamente malo,” reflexiona Javier, un turista argentino mientras contempla las aguas turquesas que bañan la costa de Tulum. Ubicada en el estado de Quintana Roo, en la península de Yucatán, esta joya caribeña ha experimentado un vertiginoso crecimiento en los últimos años.
A la sombra de Cancún, Tulum se ha desarrollado como una alternativa cada vez más popular para aquellos que buscan un refugio más tranquilo y menos comercial. Quintana Roo, con sus 20 millones de visitantes anuales, recibe alrededor de 150 mil turistas argentinos cada año. Y aunque Cancún y Playa del Carmen siguen siendo destinos icónicos, cada vez más viajeros eligen las playas de Tulum para disfrutar de su contexto agreste y su atmósfera más serena.
El crecimiento no solo se observa en el aumento de turistas, sino también en su infraestructura. Las nuevas construcciones hoteleras se alinean con la costa, ofreciendo vistas inigualables al mar Caribe. Hay opciones boutique, con una experiencia más personalizada y exclusiva. “Tulum es un destino más virgen que todavía se preserva en comparación con otros lugares cercanos y la gente nos elige para descansar y disfrutar de las playas con más tranquilidad”, explica Verena Rivetta, gerente del Hotel María del Mar.
Y grandes complejos All Inclusive con entretenimiento y actividades durante las 24 horas del día. Por ejemplo, el Bahía Príncipe ofrece una vez por semana su espectáculo Origen, en el que un mundo de color, cultura y tradición se presenta a través de un viaje por las etapas, momentos y rasgos más emblemáticos de México.
Las ruinas arqueológicas mayas, situadas en un acantilado con vistas al océano, siguen siendo un imán cultural que atrae tanto a los amantes de la historia como a los buscadores de experiencias espirituales. También se encuentra a dos horas de Tulum Chichén Itzá, otra maravilla arqueológica y visita obligada para todos los turistas que elijan algún destino de la Riviera.
Para acompañar este auge, la región ha sido testigo de una significativa mejora en conectividad. La reciente inauguración del Aeropuerto Internacional Felipe Carrillo ha facilitado el acceso. Aerolíneas como Copa ahora ofrecen cuatro vuelos semanales (lunes, miércoles, viernes y domingos), que permiten a los viajeros combinar su viaje desde Buenos Aires o desde otras grandes ciudades de la región en el hub de Panamá.
El auge del desarrollo inmobiliario y hotelero han planteado desafíos para preservación del medio ambiente. Las autoridades entienden que el crecimiento de la zona es inevitable, pero buscan hacerlo de forma sustentable. Por eso rigen normas que establecen que las actividades y servicios turísticos deben realizarse atendiendo un enfoque de economía verde.
El aeropuerto internacional de Tulum fue inaugurado el año pasado. Los argentinos pueden volar desde Buenos Aires a través de Copa Airlines
En esta nota, una lista de las atracciones imperdibles que pueden visitar quienes elijan esta perla del Caribe mexicano.
Sitio Arqueológico de Tulum
El Sitio Arqueológico de Tulum es una de las joyas emblemáticas de la Riviera Maya. Es en rigor el Tulum original y está ubicado en un acantilado que domina el mar Caribe, ofrece una combinación única de historia y belleza natural. Fue una de las últimas ciudades habitadas y construidas por los mayas, prosperando entre los siglos XIII y XV, poco antes de la llegada de los españoles.
El sitio era un importante puerto comercial para los mayas, especialmente en el intercambio de obsidiana, jade y otras mercancías. A diferencia de otras ciudades mayas más grandes y complejas, Tulum fue una de las pocas rodeadas por una muralla defensiva, lo que refleja su importancia estratégica y la necesidad de protegerse de posibles invasores.
El Castillo es la estructura más imponente y famosa del sitio, situada en el borde del acantilado. Se cree que servía tanto como faro para los navegantes mayas como templo religioso. Desde aquí, se obtienen vistas panorámicas impresionantes del océano y las playas.
La Biosfera de Sian Ka’an
La Biosfera de Sian Ka’an es un vasto paraíso natural que se extiende a lo largo de la costa de Quintana Roo, al sur de Tulum. Declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1987, Sian Ka’an, que en maya significa “puerta del cielo” o “donde nace el cielo”, es una de las reservas naturales más grandes y diversas de México.
La reserva cubre 652000 hectáreas, abarcando una amplia variedad de ecosistemas, desde manglares y cenotes hasta bosques tropicales, lagunas costeras y arrecifes de coral. “Sian Ka’an representa el punto de partida del ecoturismo”, aseguró Manuel Galindo, guía de Community tours.
El paseo en lancha es una de las actividades más populares. Incluye antiguos recorridos mayas por canales y lagunas. Durante el paseo, los visitantes pueden observar la flora y fauna locales, incluyendo aves exóticas y cocodrilos, y aprender sobre los esfuerzos de conservación de la reserva.
Se destaca especialmente la posibilidad que tienen los turistas de flotar y dejarse llevar por la corriente de sus canales.
Tal es el compromiso con la sustentabilidad de la zona, que los turistas tienen prohibido utilizar repelentes o protectores solares no biodegrables.
Bacalar
La laguna de los 7 colores, en Bacalar, a dos horas de Tulum. Una visita imperdible para quienes viajen a la Riviera Maya
La laguna Bacalar, conocida también como la Laguna de los Siete Colores, es un destino mágico situado a tres horas por ruta al sur de Tulum, que ha capturado la atención de viajeros en los últimos años.
Esta laguna, con su deslumbrante paleta de azules, se ha convertido en un destino emergente en la Riviera Maya, gracias a su belleza natural y a la infraestructura turística que crece en armonía con su entorno. “En Bacalar, pueden nadar sobre el Gran Dragón Azul”, dicen los guías locales. Quienes realicen la visita, podrán entender a qué se refieren.
Bacalar también ofrece la posibilidad de visitar el fuerte San Felipe para revivir historias de piratas del 1700.
La recomendación es salir temprano de la zona hotelera de Tulum para aprovechar el día. Los operadores turísticos ofrecen refrigerios y bebidas durante el recorrido completo. Lo más atractivo de la laguna es que sus aguas tranquilas ofrecen mucha seguridad para practicar deportes acuáticos y disfrutar del sol.
Bacalar cuenta además con una infraestructura hotelera propia en pleno auge, ideal para quienes quieran hospedarse uno o dos días frente a la laguna.
Los parques de Xcaret
Fueron recientemente reconocidos por Forbes Travel Guides por su excelencia. Ofrecen diversión y experiencias naturales para toda la familia.
El parque Xplor Fuego, por ejemplo, se especializa en aventuras nocturnas, ofrece tirolesas sobre el bosque, caminatas por cavernas subterráneas y el emocionante Toboganxote, de gran altura y velocidad, perfecto para los más audaces.
Estas atracciones hacen de Tulum no solo un destino para relajarse en sus playas, sino también un punto de partida para explorar la riqueza natural, histórica y cultural de la región.